Todos tenemos un talento del cual puede salir un negocio.
Muchas personas nos desconocemos a nosotros mismos. Cuándo nos preguntan: ¿Qué es lo que realmente nos gusta hacer? respondemos evasivamente como si fuera la primera vez que nos hacían la pregunta.
Tenemos que convencernos que somos personas únicas y por ser únicas también tenemos cualidades únicas, irrepetibles, originales.
Con una de ellas, la que más nos llama la atención, buscamos a extender nuestros conocimientos teóricos y sobre todo prácticos.
Con ensayos y errores, ya hemos aprendido mucho. Ahora ya somos expertos en esta materia.
Ahora podemos analizar como nuestros saberes pueden ayudar y resolver la necesidad de muchas personas.
Un talento, es algo que nos fascina hacer.
Nos fascina porque somos capaces de:
- quedar horas y horas realizando tal actividad que para otros resulta ser altamente aburridora.
- pensar en eso día y noche y levantarse cansado pero el ojo brillante con la idea genial que se nos ocurrió mientras dormíamos a medias.
- renunciar a muchas comodidades de tal manera que eso que pensamos, analizamos y realizamos funcione como tiene que ser.
- pedir a los que nos rodean los tantos sacrificios que ya les pedimos y le seguiremos pidiendo.
Somos inclusive capaces de aguantar el menosprecio, las críticas, las burlas de los que asistan sin mover a nuestra desgracia cuando las cosas no parecen marchar como deberían pero que son los primeros en aprovechar de tu riqueza cuando todo va bien?
SI. Nos tiene que fascinar lo que hacemos para poder alcanzar a lidiar con todas estas cosas y seguir siendo felices.
Complementar nuestros talentos con los de otros.
Ahora bien, no podemos tener la totalidad de los talentos que vamos a necesitar en el negocio. Si somos excelentes en ventas, nos faltan aptitudes para los números y la contabilidad. Si tenemos oro en las manos para realizar alguna artesanía, nos falta mucho para el mercadeo digital….
Pero también siempre podemos buscar personas que como nosotros quieren emprender y que tienen los talentos que a nosotros nos hace falta.
Agruparse entre 3,4,5 o más personas tiene enormes ventajas: armar un proyecto con todas las habilidades complementarias que necesitamos, entre otras ventas, producción, administración, innovación…; tener más posibilidades de conseguir las herramientas que requerimos; dar más chance al negocio cuando uno de los participantes flaquea; tener una base más amplia en sus familias y amigos.
Sin embargo, la gente suele decir que trabajar entre varios es difícil. Eso no es verdad si seguimos unas pocas recomendaciones que veremos en un próximo artículo.
Preguntas de reflexión.
- ¿Con cuál talento te identifican más las personas que tienes alrededor?
- ¿Con ese talento puedes montar un proyecto productivo? ¿Cómo?
- Enumeras las diferentes escalas para alcanzar a desarrollar tu talento en función de tu futura empresa. Defina un tiempo máximo para lograr trepar y evalúa constantemente el logro de cada una de ellas
- En tu talento hay cosas que te gustan más y otros menos. Escribe lo que más te gusta hacer y también lo que menos te gusta hacer.
- ¿Qué habilidades te faltan? ¿Quién(es) a tu alrededor las puede tener?